Traducción del Catalán al Español publicado en audio en este blog el 14/04/17
Reunión grupal en la Sociedad Teosófica Rama Armonía de Barcelona, Catalunya (España) 1999
Al iniciar una relación grupal generalmente lo hacemos inducidos por un impulso del alma, que produce en nuestro interior la necesidad de búsqueda de algo que quizás intuimos, pero que normalmente aún no somos conscientes de su trascendencia.
Todos los seres humanos que vivimos en el planeta somos almas que hemos encarnado con una finalidad; redimir la materia y servir al Plan de nuestro Logos a fin de dar un impulso a la evolución espiritual planetaria.
Las Almas formamos parte de lo que en los tratados ocultos se denomina "Grupos Egoicos". Venimos a la encarnación unidos por vibración similar de rayo, manifestando unas características que determinarán el servicio que nos corresponde prestar en alguno de los distintos sectores de la sociedad donde vivimos. Por ejemplo: las almas de 5º rayo tendrán una tendencia científica, el 6º rayo se orientará hacia la religión, el 2º rayo hacia la enseñanza, el 1º hacia la política... Sea cual sea la tendencia de rayo el impulso que nos moverá al hacia el servicio siempre estará inducido por el Amor.
Cuando iniciamos por primera vez la relación grupal buscamos información pensando en nosotros mismos y el conocimiento que podamos adquirir de los mundos ocultos y de nuestra propia evolución. Esta actitud indica que todavía somos muy individualistas y que la entrada en un grupo esotérico no es debida a que queramos servir a la humanidad sino a nosotros mismos, pues para llegar a esta etapa tendremos que haber adquirido la consciencia grupal y haber establecido un contacto con nuestra propia Alma o (Ángel solar).
Al encarnar ocupamos unos vehículos que nos van a servir para llevar a cabo el propósito del Alma y el destino que nos corresponde, recogiendo los frutos de las experiencias vividas en el pasado y con toda esta carga positiva y negativa iniciaremos una nueva encarnación.
El sentimiento de soledad es casi siempre el motivo de esta búsqueda grupal. Aunque como seguramente sabremos por propia experiencia, existen distintas formas de experimentar la soledad. No es lo mismo una soledad impuesta por el karma que la soledad que siente el aspirante espiritual cuando entra en el Sendero y descubre que no le es nada fácil encontrar con quienes compartir sus inquietudes espirituales. Tampoco podemos dar la culpa al karma, pues el karma lo hemos generado nosotros mismos o sea que es la consecuencia de nuestros propios actos.
Pero hay que estar muy atentos, porqué el sentimiento de soledad siempre indica una excesiva atención en uno mismo. aunque se trate de un aspirante avanzado. Mientras tengamos puesta la atención en lo personal, la integración grupal no será posible porqué el Alma no reconoce otra forma de manifestarse que no sea grupalmente.
Quizás nos habremos dado cuenta que cada reino de la naturaleza, cada especie que vive y se desarrolla en nuestro mundo formamos parte de un grupo. Nada evoluciona por separado, aunque cuando el ser humano desarrolla la mente intelectual se cree especial y separado en su individualismo, es separativo y ego-ista. Esta tendencia indica que se está integrando la personalidad. Es una etapa necesaria por la que todos tenemos que pasar para poder acceder a niveles superiores, sin embargo es en este estado de consciencia donde las pruebas son más difíciles de pasar, porqué el egoísmo adquirido debe ser trasformado en altruismo lo cual indica que tenemos que haber cambiado la orientación de nuestra propia consciencia.
Por esta razón muchos grupos fracasan porqué piensan más en sus personalidades y su propia evolución que en el servicio.
Venimos a la vida rodeados de una familia con la cual estamos unidos por lazos de sangre. Entramos en la escuela en donde compartimos con los compañeros de estudios unas mismas enseñanzas. Socialmente estamos unidos a un grupo más numeroso, a una raza, a un pueblo o a una nación, pero estos lazos únicamente son externos y personales. Existen muchas clases de grupos, algunos de ellos están hollando el camino que conduce a la integración grupal y esto indica que empiezan a responder a la influencia del alma, aunque hay otros que tan sólo les une una simple simpatía y amistad personal.
Con ciertos grupos de personas podemos estar unidos por afinidad emocional atraídos por la música, por ejemplo. Con otros existirá una atracción física por el deporte; otros con los cuales podemos identificarnos en unas mismas ideas y tendencias mentales. Pero no es nada fácil coincidir en la unión de los tres estados de consciencia a la vez. Incluso perteneciendo a un mismo grupo egoico, los rayos de la personalidad acostumbran a ser distintos e interferir en la relación grupal, porqué mientras la integración como almas no se haya producido, las personalidades chocarán.
Con este comentario quiero dar a entender que no es fácil que un grupo sea verdaderamente esotérico y sirva unificado de tal manera que se funda en una sola Alma grupal.
Sin embargo existe un grupo interno, es el grupo egoico con el cual descendimos a la encarnación, ésta es nuestra verdadera familia espiritual.
¿ Sabremos reconocer a las almas con las cuales estamos unidos por lazos espirituales? Porqué no se puede re-conocer nada que no forme parte de nosotros mismos.
No pensemos que todos los miembros de un grupo esotérico pertenecen a la misma familia espiritual, al menos entre los grupos que empiezan. Sin embargo para quienes han desarrollado la consciencia del Alma el reconocimiento mutuo es inmediato. También puede ocurrir que, aunque no acostumbra a producirse muy a menudo a veces dentro de la familia carnal existe algún miembro de nuestro grupo egoico o en el caso de una amistad o con alguien que "casualmente" se cruza en nuestro camino. En cualquiera de estos casos (aunque exista un vínculo personal) la relación se establecerá siempre desde los niveles del alma.
La consciencia grupal no puede manifestarse hasta que el ser humano llega a una etapa evolutiva bastante avanzada, cuando la personalidad se ha convertido en nuestro instrumento y como almas en encarnación la utilizamos para llevar a cabo en el servicio previsto.
La impersonalidad siempre nos conduce a la inofensividad y demuestra el olvido de uno mismo, entonces podemos decir que estamos preparados para formar parte de un grupo esotérico y contribuir a la evolución planetaria.
Marta Parramon
¿Cómo podemos alcanzar la conciencia grupal si todavía nos movemos en la dualidad? Como nos dices, sólo si nos reconocemos como almas podremos actuar como tal y en consecuencia nuestra conciencia será grupal.
ResponderEliminarMe pregunto cómo podríamos definir la conciencia grupal y lo primero que se me muestra es que es un primer peldaño hacia la Unidad..., o por decirlo de otra manera, el inicio en el sendero hacia el Uno o lo que llamamos conciencia monádica.
Mientras, es importante observar lo que nos comentas:la soledad delata un excesivo pensar en uno mismo. Por contra, el Alma solo sabe de Servicio; esta es su natural expresión.
Gracias por tan significativas palabras.
Neus
El Maestro Tibetano nos da mucha información sobre el camino del discipulado, lo que ocurre es que mientras el aspirante oscila entre los pares de opuestos (lo que indica una crisis de consciencia) existe todavía la resistencia a aceptar que su orientación en la vida debe cambiar si lo que desa es convertirse en discípulo del Maestro.
ResponderEliminarEn general somos muy individualistas y aquí yace el conflicto, porqué deseamos servir pero sin tener que renunciar a las tendencias del pasado a las cuales estamos tan apegados.
Una iniciación no es algo que se de sin que nos la hayamos ganado a costa de duro esfuerzo.
Muchas personas piensan que por tener conocimientos esotéricos les convierte en discípulos, pero esto no es suficiente. El trabajo de irnos formando es interno i externo a la vez.Se trata de adquirir una comprensión profunda de las enseñanzas y entonces las podremos aplicar a nuestra vida y compartirlas con el grupo.
Somos Almas revestidas de carne y huesos, pero estamos tan identificados con lo que nos proporcionan los sentidos físicos, astrales y nuestra mente concreta que aunque teóricamente sabemos que somos almas no nos atrevemos a demostrarlo porqué ello implica la renuncia al yo personal.
¿Porqué nos escudamos detrás de mil y un argumentos para no tener que desprendernos de nuestros apegos personales.?
La respuesta es muy sencilla... porqué tenemos miedo a perder lo adquirido, porqué no sabemos lo que significa ser un discípulo que está actuando como Alma entregado al servicio con plena responsabilidad, lo cual requiere el olvido de uno mismo y haber adquirido esta consciencia de Unidad, como dices tu Neus.
El Maestro les dice a Sus discípulos, "Estad preparados para vivir en la soledad y no esperéis recompensas al servicio que estais prestando, todavía existe mucha incomprensión e ignorancia en el mundo, pero sabed que no estais solos y que Yo y vuestros hermanos de grupo siempre os acompañaremos"
El poder llegar a estar en presencia del Maestro compensa con creces todas las dificultades que podamos encontrarnos en el mundo y en la vida de Servicio.
Gracias Neus.
Un abrazo
Hola Marta y compañía, si, no es fácil la unidad grupal y como tal, dicha dificultad presenta una oportunidad de crecimiento individual y a su vez grupal.
ResponderEliminarEn verdad la dualidad de la que nos habla Neus, o el choque de personalidades del que hablas tu Marta, es la oportunidad de relacionar las enraizadas tendencias personales con las mas novedosas y sugerentes realidades espirituales. Como sabemos sin dicha experiencia dual no hay revelación de unidad.
Uno de los máximos objetivos de la Jerarquía para con la humanidad es lograr las "correctas relaciones", y el primer paso lo tienen que dar, con su ejemplo, los grupos mas cercanos a Ella.
Ver a un grupo unido, sea musical, monástico, esotérico, científico o educacional siempre es un centro de "luz", algo magnético e irradiante a la vez. Es como el mucho Bien (muy a menudo inconsciente) que emana de una familia bien avenida.
Pienso y creo firmemente, y seguro que vosotras también, que lo importante en un grupo es percibir a las otras personalidades (almas) desde el Alma, y hay aquí una referencia al Alma Una.
Es claro que esta percepción no es fácil, porque muy a menudo en los miembros de un grupo se impone el error de una reacción demasiado emocional o idealizada, o el "yo más" con su agresividad destructora, o el "yo menos" con su desconfianza y pesimismo, o la precipitación de la palabra bien intencionada pero falta de experiencia o verdad, o el exceso de intelectualidad, o el análisis separador, o quizás incluso un cierto autismo por sentido de superioridad, miedo o confusión entre lo emocional inferior y lo verdaderamente amoroso y unificador..., en fin, que como decíamos no es fácil percibir el Alma unificadora, pero que, para subsanar estas tendencias negativas, (y aquí la oportunidad), siempre hay uno o mas miembros del grupo que en estos momentos de "ajetreo personal grupal" se ha sabido mantener "alejado" o impersonal para así, desde su divina atención, poder reconocer la oportunidad para retomar el ritmo correcto o sattva grupal.
La personalidad, (por ser la esencia de la materia o tercer aspecto en el ser-humano), siempre estará presente y será necesaria para el buen participar del grupo, y es claro, que por lógica evolutiva en unas conciencias su participar será mas impersonal o inofensivo que en otras, pero, también es claro que si el grupo tiene verdadero sentido de unidad, en todos sus miembros siempre existirá la oportunidad de practicar (para su bien y desde el nivel de comprensión de cada uno) la impersonalidad, inofensividad o las correctas relaciones creadoras de unidad.
Un abrazo!
Sí David!
ResponderEliminarCuando hablo de la consciencia grupal, es de suponer que no me refiero a las buenas personas que todavía pertenecen a la humanidad común, que practica la buena voluntad y las correctas relaciones.
Me refiero a la vida del DISCÍPULO que se ha comprometido en el Servicio.
No es nada fàcil adquirir la consciencia grupal y encontrar la forma de compaginarlo con la vida de la personalidad. De ahí el consejo que el Maestro da a Sus discípulos; "Hay que aprender a vivir en el mundo sin ser del mundo" y en esta frase se halla la respuesta al porqué de la soledad que se siente cuando al incorporarse en nuestro interior la consciencia del alma nos volvemos más impersonales y el concepto que teníamos de lo que significa la vida cambia sensiblemente.
Expandimos la visión de adentro a fuera, ya no estamos centrados en un grupo reducido de seres queridos o de amistades. Nuestra consciencia y nuestra comprensión hacia las necesidades del mundo no se interesa tanto en los efectos sinó en las causas más profundas que yacen en las consciencias de la humanidad.
No digo que no haya que poner atención a los asuntos y relaciones personales, desde luego que sí, pero si en vez de pensar constantemente en nosotros mismos centráramos nuestra atención en el servicio que estamos capacitados para prestar, nuestra personalidad se adaptaría aún sin habérnoslo propuesto, porqué todo cuanto ocurra en nuestra consciencia se acaba por manifestar en la vida externa de relaciones y en nuestro propio caràcter.
Primero " Hombre, conócete a ti mismo como al Uno Imperecedero" Se trata de "Ser o no Ser" y en esto volvemos de nuevo a la lucha entre los pares de opuestos.
El servicio demanda dedicación y compromiso, es una experiencia que tiene sus recompensas internas, aunque no deberíamos esperarlas.
La vida actual de relación grupal puede ser muy importante para algunos miembros del grupo porqué proporciona la luz y el enfoque hacia la realización de un estado de consciencia superior. Para otros tendrá otro significado, aunque también será importante porqué les servirá como prueba.
Un abrazo